Ya no quiero el vértigo del momento que después se vuelve efímero. Quiero la lenta pausa, la mirada que mira, el beso que se siente, las palabras que se escuchan sin sobreponerse, porque no importa lo que vamos a decir, sino lo que estamos escuchando. No quiero locura, quiero amor que cura, no quiero atar, quiero desatar ese amor que nunca sentiste. Ya no quiero el vértigo del momento, quiero tú lento amor, sin prisa y sin tiempo.
Nacido en el Delta, papá, ex,simpatizante de Argentinos Juniors. Lector y escritor cuando la inspiración me lo permite. El río es mí tranquilizante natural. Tigre,Buenos Aires, Argentina